La pandemia promovió la modalidad de enseñanza online debido a la imposibilidad de tomar clases presenciales. Muchos señalan un antes y un después de la pandemia ya que tanto maestros y alumnos tuvieron que adaptarse a la nueva modalidad. Esto conllevó a toda una nueva forma de enseñar y aprender, que fue recibido de manera relativamente positiva por las herramientas que ofreció. Muchas escuelas comenzaron a emplear este método en línea por la falta de necesidad de que los estudiantes estén presentes en clase o por expandir su programa de asignaciones. Además de esto, las ventajas de no tener que gastar por el traslado, estar en la comodidad en casa, la facilidad de utilizar las computadoras para programar actividades, exámenes, lecturas, entre otras, son aprovechadas por esta modalidad. En algunos casos, se adoptó un modelo híbrido, pero la pregunta que nos queda es ¿Aún hay ventajas de la educación presencial? La respuesta corta es que sí, y en el siguiente artículo te informaremos de las ventajas de las clases presenciales con mayor detalle.
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15 ventajas de la educación presencial
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1. Desarrollo de habilidades sociales
Una de las principales ventajas de la educación presencial es el desarrollo de las habilidades sociales de los alumnos. No es lo mismo interactuar con tus compañeros a través de la computadora que en el salón, donde puedes verlos y sentirlos directamente.
En este tipo de ambientes aumenta la probabilidad de interacciones entre los estudiantes, aprender a hablar en público, generar preguntas y disminuir la timidez.
2. Accesibilidad
No todos tenemos Internet o computadora en casa, pero la mayoría de las instituciones tienen las herramientas necesarias para estudiar. La modalidad presencial es más accesible para los estudiantes gracias a lo que proporciona a los mismos y asegura que las clases sean equitativas y con calidad.
3. Motivación
Es muy diferente tomar clases en línea y estar en la comodidad de tú casa que tomar presenciales y estar en presencia de tus amigos.
Una de las ventajas de las clases presenciales es la oportunidad de que los estudiantes interactúen y se motiven entre ellos. Quizás no les gusta tanto la clase, pero si participar y hacer equipo con sus amigos.
También es importante señalar que en las clases presenciales hay menos distracciones, así que los estudiantes se concentran con mayor facilidad.
4. Comprensión
Claro que en las clases online entenderás los temas, sin embargo, una de las ventajas de las clases presenciales es la facilidad de acceder a materiales o la ventaja de poder preguntar a tu profesor de algún tema si aún se encuentra en la institución.
Otra capacidad útil que desarrolla es la comprensión verbal al poder comunicarte con alguien más. Al ser presencial la interacción, puedes notar cambios de humor, tono, corporales y más, haciendo más fácil la comprensión de la conversación.
5. Organización
Otra de las ventajas de la educación presencial es que te permite que los profesores establezcan rutinas de estudio, actividades y tareas con mayor facilidad. Si bien es posible hacer esto en línea, esta rutina se transmite a los estudiantes, ya que tienen que estar preparados para ir a sus clases, disciplinarse para llegar a tiempo, vestirse, entre otras.
6.Clases dinámicas
Las clases presenciales permiten más actividades que propician la actividad con los alumnos. Es muy difícil interactuar con un estudiante que no tiene cámara o micrófono encendido y por lo tanto no sabes cómo está tomando las clases.
Las clases presenciales hacen que el docente adapte sus estrategias a partir de las necesidades que observa en el grupo.
7. Personalización
Cómo se mencionó en el punto anterior, es muy difícil interactuar con un estudiante o profesor que tiene la pantalla apagada. En las clases presenciales, los profesores pueden hablar con los estudiantes si hay algún problema o viceversa. De igual manera, si el maestro nota algún problema, lo identificará más pronto en las clases presenciales ya que la presencialidad facilita la interacción.
8. Interacción
Otra de las ventajas de la educación presencial es la interacción. Esta palabra la has escuchado varias veces en el artículo, ¿Por qué hacerle un apartado? Más allá de las interacciones escolares, están las del día a día. Algunas personas toman el transporte público y desarrollan habilidades para saber trasladarse e interactuar con las personas.
En el caso de las personas que vayan en carro, su inteligencia vial y comunicación con los demás (sea conductores o transeúntes) aumenta debido a la experiencia y mejora su manera de trasladarse.
Esto solo es un ejemplo de tantos que se puede mencionar sobre cómo la presencialidad hace que las personas interactúen y pongan a prueba sus habilidades para sobrellevar la cotidianidad.
9. Facilidad de resolución de dudas o consultas
Más allá de algún problema con tu profesor, una ventaja de las clases presenciales es que, si tienes algún asunto relacionado con lo administrativo o educativo, puedes acceder con mayor facilidad.
Ya que estas en el plantel, puedes aprovechar tú ida a la institución escolar para ver que necesitas como tomar un semestre, reportar que faltarás la siguiente semana, ir por tú credencial escolar, y un sinfín de cuestiones administrativos que surgen.
10. Compañerismo
Así como en las clases presenciales se facilita la interacción entre amigos, también entre compañeros. El conocer a alguien, aun si no interactúas seguido, crea un lazo que te permite ayudarlo cuando lo necesite y viceversa.
No necesariamente se crea una amistad, pero si una relación donde tanto tú como la persona con la que interactúas puede generar una relación positiva.
11. Comunicación de tú a tú con tu tutor/a
En muchas instituciones se provee a los estudiantes con un tutor en caso de tener problemas. La modalidad presencial ofrece que las interacciones con tu tutor sean fáciles de realizar y puedes ir directamente con tu tutor para comunicar tú problema.
12. Evitar la monotonía
Claro que una clase presencial puede ser monótona, pero al salir del hogar, las posibilidades de que ocurra algo nuevo aumentan. Estar en la casa es cómodo pero puede ser muy monótono ya que estas siempre en el mismo espacio.
13. Poner en práctica los conocimientos
Este punto afecta a todos, pero se enseña mejor a partir de las ciencias exactas. ¿Cómo vas a hacer un circuito si todo lo que aprendes es teoría y en línea? En casa no todos tienen las herramientas necesarias para aplicarlo y podrías ponerte en peligro.
De igual manera, alguien que estudia ciencias sociales no podría aplicar sus métodos para estudiar la sociedad si está limitado a hacerlo solo de manera indirecta. Ir a clases presenciales hace que puedas poner en práctica lo que aprendes.
14. Falta de calidad
El hecho de que haya menos interacción, menos personalización, menos accesibilidad de recursos, entre otros detalles hacen que las probabilidades de tener una clase de baja calidad aumenten. Obviamente se puede conseguir calidad en clases línea, pero es mucho más difícil hacerlo en esta modalidad.
15. Costumbre
Muchos de nosotros estamos acostumbrados a la modalidad presencial, por lo que hace más difícil adaptarse a la modalidad en línea.
Una de las ventajas de las clases presenciales son que, para muchos, es la modalidad que ya conocemos y sabemos llevar a cabo.
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1. Poca personalización
Las clases en línea limitan las interacciones entre alumnos y maestros. En consecuencia, los alumnos tienen clases menos especializadas, es decir, el maestro sabe menos como educar al estudiante ya que no conoce los problemas individuales. Termina causando que los estudiantes se atrasen hasta que el profesor encuentre el tiempo de hablar sobre el problema, si es que este tiene la oportunidad de hacerlo.
2. Dificultad de seguimiento
Conectada con el punto anterior, el seguimiento es un proceso por el cual los profesores registran los avances de los alumnos. Checar su estado de ánimo, si les parece bien la clase y los trabajos, por qué están atrasados en las actividades si es que lo están, que problemas tienen, etc., son solo algunos ejemplos de los seguimientos que hacen los profesores.
Las clases en línea, en especial los grandes grupos, tienen poco tiempo para esto y las interacciones a veces se limitan simples correos.
3. Menor participación de los alumnos en las clases
Muchos alumnos optan por la opción de bloquear sus cámaras y micrófonos, como respuesta, muchos profesores sufren dificultades porque no saben si el alumno tiene dudas o si están ahí en realidad. Este problema está ligado a las distracciones que tienen los alumnos en sus hogares, y varios terminan distrayendo con otros asuntos. El resultado es poca participación en la clase, causando problemas en su desarrollo estudiantil.
4. Necesidad de herramientas tecnológicas
La virtualidad ofrece muchas herramientas, pero… ¿Cuál es la más efectiva? La lucha de los profesores y estudiantes por entender que herramientas son útiles y cuales estorbosas continua. Y esto es si las páginas que utilizan no tienen problemas como ocurre en ocasiones. De igual manera, aprender a cómo utilizar la plataforma a toda su extensión es un lujo que muchos profesores no hacen por cuestiones de tiempo, lo cual repercute en los alumnos y la clase.
5. Necesidad de una buena conexión
Así como la presencialidad ofrece accesibilidad, las clases online son el caso contrario. Hay que recordar que, en muchos países, el Internet sigue siendo un servicio que no tiene ni siquiera cincuenta por ciento de la población.
6. Imposibilidad de poner en práctica los conocimientos
En las clases presenciales es muy difícil poner en práctica lo que necesitas hacer. Al menos que estés en programación y necesites hacer un programa desde la computadora, es muy difícil finalizar tareas y actividades que requieren terceros y materiales difíciles de conseguir. Para ejemplificar, incluso si estudias programación, quizás no tienes el programa necesario que la escuela te provee a través de sus computadoras.
7. Dificultad para realizar evaluaciones
Las evaluaciones en línea son difíciles por los puntos anteriores. La falta de participación, de interacción con los alumnos, falta de preguntas, entre otras, obliga al profesor a solo calificar a través de las tareas y actividades. Esto es insuficiente debido a que el profesor tiene muchas dificultades al intentar resolver los problemas que tiene el estudiante en caso de que tenga notas bajas o no puede calificar el desarrollo otras habilidades aparte de cumplir con asignaciones.
8. Muchas horas delante de la pantalla
Desde alterar la forma de vincularse y socializar, hasta dañarse la vista, pasar demasiadas horas en la pantalla es negativo. El problema no es el hecho de que la usen, pero, si se usa para las clases, divertirse y distraerse, el usuario termina usando las pantallas demasiado tiempo. Esto al final causa que termine desarrollando trastornos y enfermedades tanto físicas como mentales.
9. Mayor cantidad de trampas y engaños en pruebas
Cuando no hay un profesor presente, el estudiante puede buscar las respuestas de su examen. Esto aumento ahora que están en la comodidad de su casa, ya que el profesor no puede distinguir si su estudiante solo ve la pantalla o si hace trampa en la prueba.
10. Inasistencias totales o parciales
Una posibilidad es que el estudiante falte por la falta de motivación o, en algunos casos, ignoré la clase completamente y solo finja estar ahí. Las repercusiones son muy notorias y estas terminan afectando tanto el aprendizaje del estudiante como su calificación a largo plazo.
¿Cuáles son las consecuencias psicológicas del distanciamiento social?
1. Surgimiento de miedos
El aislamiento social provocó un estado de paranoia enorme. Muchos recuerdan que en su país la gente comenzó a comprar de más, con la idea de que podría pasar algún otro desastre. Si bien nunca está de más prepararse, esto causó un escaseo horrible que termino afectando a terceros.
La paranoia y miedos no terminan ahí, ya que se crean miedos psicólogos de otra pandemia, ansiedad de sentirse vulnerable en casa, económicos y algunos otros. A la larga, este tipo de ansiedad y estrés dañan la salud y termina afectando al individuo.
2. Frustración, enojo o irritabilidad
El aislamiento causó muchas emociones encontradas, la mayoría de ellas negativas. El hecho de no tener la posibilidad de salir, tener que cambiar el modo de vida, usar obligatoriamente cubrebocas, no poder verse con amigos, estar demasiado en casa, en fin, obligar a las personas a actuar diferente afectó a muchos.
Esta falta de adaptarse es normal ya que estos cambios hacen que las personas tengan que volver a crear una rutina, haciendo que falle o cometa errores, lo cual causa más enojo e irritabilidad. Esto probablemente genera peores consecuencias si no son tratadas por un experto en psicología, provocando más problemas mientras menos se trate.
3. Estigmatización
Algunas personas se han visto rechazadas debido a sufrir la enfermedad del coronavirus De esta forma, existen casos en los que estos enfermos se han visto estigmatizados.
¿Por qué es relevante? No sabemos si puede ocurrir otra pandemia, pero lo cierto es que las personas que están asociadas a algún problema social terminan estigmatizadas y la gente los empieza a alejar, aunque no son el problema en sí. Esta forma de pensar, en los peores casos, puede terminar en dañar no solo psicológicamente, sino hasta físicamente a los estigmatizados.
4. Problemas relacionados a la salud mental
Durante el distanciamiento social los casos de depresión también aumentaron. De esta forma, las personas que estaban con problemas psicológicos durante el distanciamiento y el confinamiento se han visto en una situación que les ha propiciado más malestar psicológico.
Consejos para reintegrarse después del aislamiento social
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1. Mantente en contacto con amigos
Mantenerte en contacto con tus amigos ayuda a no ahogarse en “un vaso de agua” como dice el dicho popular. Además, puedes ver maneras de juntarte y pasar el tiempo con ellos, sea en línea o presencial si es que es posible en el momento. La soledad toma segundo plano cuando recuerdas que hay personas a las que les importas.
2. Dejar de ver tantos las noticias
Es bueno estar informado, pero tienes que tomar en cuenta que genera mucho estrés las noticias negativas. Tomate un breve descanso para enfocarte en ti y tus seres queridos antes de ahondar en las noticias para estar bien informado.
3. Consulta un profesional
La psicología y psiquiatría son profesiones por buenas razones. Su servicio social es indispensable y cada vez más gente lo reconoce. Si ves que estas deprimido, triste u algún otro indicio de enfermedad mental debido al aislamiento, contacta a un experto para averiguar que pasa y como tratarlo.
4. Encuentra actividades que te relajen.
Hacer algo que disfrutas causa que estés cómodo y feliz. Además de ser una buena forma de distraerte, ayuda a que te desarrolles en algo que te gusta y encuentres nuevas maneras de hacer tus hobbies o aprender cosas que no sabías relacionados con ellos.
5. Conservar un horario y ritmo de vida estructurado
El conservar un horario y ritmo estructurado permite que te sientas y seas más productivo. Ya no sentirás que estas desperdiciando el día si te das cuenta como lo aprovechas.
6. Sostener una dieta balanceada, buena hidratación, sueño suficiente y hacer ejercicio
Una vida saludable mantiene una mente saludable. Muchos problemas relacionados a la salud mental se generan porque no hay un equilibrio con la salud física. Mantener a la última no es lo único que necesitas para tener una mente sana pero no queda duda que la ayuda.
Conclusión
La pandemia fue un antes y después para todo el mundo. El cambio de presencial a online fue solo uno de los tantos cambios que vivieron las personas que provocó demasiados estragos para todos. Sin embargo, aún se encuentran ventajas de la educación presencial.
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El aprender un idioma nuevo es una forma productiva de combatir la monotonía y abrirte posibilidades laborales y académicas, además de nuevas experiencias.
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